El príncipe Harry decidió demandar a los periódicos de Mirror Group, acusándolos de recopilar ilegalmente información sobre él para «detener el odio» contra su esposa, Megan. El propio Harry dijo esto en el segundo y último día de su testimonio en el Tribunal Superior de Londres. Para ganar el caso, el hijo del rey Carlos y la princesa Diana debe demostrar que las actividades ilegales que admitieron los periódicos de Mirror Group estaban dirigidas a él, incluso escuchando ilegalmente sus mensajes de voz. La exreportera del Daily Mirror que cubría a la familia real, Jane Kerr, admitió ante el tribunal que trabajó con investigadores privados para obtener detalles personales como números de teléfono y direcciones de las personas a las que el periódico necesitaba contactar.
«No se me ocurrió que algo fuera ilegal, lo principal es verificar la veracidad de la historia», dijo en la corte. Todavía tenemos más de dos semanas antes de que termine el juicio y se esperan testigos y declaraciones finales. Pero no hay planes de que Harry vuelva a comparecer ante el tribunal. Toda Inglaterra, incluida la familia real, está observando de cerca la sala del tribunal de Londres.
