El gobierno de Venezuela celebró este domingo la implementación de los protocolos acordados entre las autoridades colombianas y la reanudación del diálogo de paz que había sido suspendido para 2019. Una medida de la que el presidente Maduro fue garante, ya que participó con sus representantes en el diálogos entre el Ejército Nacional. Liberación (ELN), las extintas FARC y el Ejecutivo colombiano, que vio regresar a representantes del ELN a Colombia luego de más de cuatro años de default por parte del Estado colombiano.
A través de su cuenta de Twitter, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, saludó las medidas acordadas entre el gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional para el retorno seguro de los representantes del grupo rebelde a Colombia. “La República Bolivariana de Venezuela, como Estado garante, ratifica su compromiso inquebrantable con la paz en Colombia y en toda América”, escribió Delsey en una carta posterior.
Por su parte, el ELN señaló en un comunicado que “con el apoyo de los países garantes: la República de Cuba, el Reino de Noruega y la República Bolivariana de Venezuela, la delegación del diálogo regresó sana y salva”.
En el texto, el ELN afirmó que el regreso de sus representantes se da más de cuatro años después de que el Estado colombiano incumpliera con el compromiso asumido en el protocolo firmado en abril de 2016.
Agradeció a los países garantes (Chile, Venezuela, Brasil, Cuba y Noruega) por acompañarlos y defender los principios del derecho internacional, y agradeció a Cuba por su hospitalidad.
El regreso de la delegación del ELN se da luego del acercamiento iniciado en agosto pasado entre una representación del gobierno colombiano, encabezada por el presidente Gustavo Petro (quien en ese momento militaba en la formación, antes de abandonar la lucha armada y convertirse en SBDACO). Bogotá), y el Ejército de Liberación Nacional para reanudar los diálogos de paz.
En la foto: En febrero, cuatro años de negociaciones secretas entre el gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) llevaron a un debate público con una mesa de diálogo abierta en el predio Cachabamba, sede de la Federación Nacional de Automovilismo, y en adelante. Sede de la Paz Ecuatoriana.