Empecemos con la aclaración necesaria: la Juventus no hizo un partido memorable, eso seguro, pero mereció el partido o no lo ganó porque el gol de Milik es un habitual sin condición.
La Juventus no jugaría bien, pero el carácter estaba ahí y el partido estaba ganado, así que hay poco que decir, cualquier comentario innecesario y ciertas decisiones no se pueden aceptar con el Var. Aceptamos los errores durante el partido no en el minuto noventa y cinco, el árbitro tenía el deber de consultar y zambullirse siempre que hubiera porque ciertas decisiones cambian la temporada.
En este punto, es deber de la Juve hacerse oír, recalcar a nivel directivo que en los últimos años se ha hecho un análisis cuidadoso de los episodios que interesan a la Juventus de manera loca en los últimos años. Cada objetivo se resta de la lupa.
El equipo de Massimiliano Allegri tiene muchos defectos, comete muchos errores y hasta ahora no por el Scudetto, pero el partido debería haberlo ganado pero no porque digamos eso sino porque un gol así no se debe anular, además del noventa y cinco. minutos en casa con dos expulsiones, lo que también es un impedimento para las próximas carreras.