Un hombre ayudó a un mono a beber un poco de agua y su reacción fue muy impactante. Su inteligencia es enorme.
Parecen haberse hecho amigos en profunda armonía, y cada vez que la cámara los filma logra crear escenas muy conmovedoras. Un hombre estuvo en contacto constante con un mono en la naturaleza y grabó todo y luego lo compartió en línea. Cualquiera que haya visto las distintas escenas subidas a su perfil de Instagram ha quedado fascinado con el comportamiento del animal, lo que demuestra que posee una inmensa inteligencia.
En uno de los tantos videos compartidos se puede ver cómo una vez la ayudó a beber un poco de agua. El gesto que hizo fue dramático. Hubo más de 224.000 seguidores de la cuenta @jcpieri que hicieron clic en el botón Me gusta debajo del clip subido al medio mencionado anteriormente, mientras que casi 300 comentarios mostraron lo impresionados que quedaron los usuarios con estas fotos.
Es un fotógrafo y director de Marsella, Francia. Para realizar sus apreciadas grabaciones de la naturaleza utiliza modelos de cámaras de Lenovo y Canon, pero también una GoPro. El chimpancé se llama Chance y parece haberse encariñado mucho con su amigo humano.
Increíble el gesto del mono hacia el hombre
Entre los muchos animales inmortalizados, Chance es el protagonista indiscutible de los reels compartidos por @jcpieri. Puedes ver muchos sketches interesantes entre ambos en esta cuenta de Instagram. Son parte de la familia Pan de mamíferos primates, que incluye dos especies distintas: los bonobos o pigmeos, que son más pequeños y suelen vivir en la República Democrática del Congo; El chimpancé común, que normalmente vive en las sabanas húmedas y los bosques tropicales de África occidental y central.
Chance es una de esas personas rescatadas por @papaye.international. Este último trabaja en Camerún, en un intento de proteger y rehabilitar a los chimpancés huérfanos, así como a las víctimas de la caza furtiva y la trata, donde son arrebatados a los delincuentes y luego entregados a las autoridades competentes.
El fotógrafo pareció llevarse bien con Chance y ella le mostró cuánto amaba que él la cuidara. De hecho, frente a un pequeño arroyo, ella le tomó las manos y trató de hacerle entender que debía colocarlas de manera que pudiera recoger agua. Cuando entendió lo que tenía que hacer, Lo recoge y le hace beberlo. Un gesto que nos hace comprender toda la inteligencia de este primate, al que parece faltarle el habla.