Por qué nos atrae tanto el olor a gasolina: Hay una explicación biológica, pero hay que tener cuidado

La atracción que experimentamos hacia el benceno tiene una explicación en biología. Pero ojo porque no todo es color de rosa.

Gasolina, ¡qué maravilla! El olor parece fuerte y picante, precisamente por estas propiedades, es capaz de Ejerce cierta atracción sobre muchos.

Por el amor de Dios, puede que esto no sea un canto de sirena, pero ciertamente no falta gente que lo haga. El olor típico les resulta bastante agradable. Del combustible que se esparce por todos lados a nuestro alrededor cuando llenamos el surtidor de gasolina.

Pero ¿por qué nos resulta agradable el olor a gasolina? Para dar una respuesta tenemos que buscarla dentro de un grupo de factores. Lo que pone en duda el mundo de la biología y el ámbito de nuestros recuerdos personales.

Gasolina porque su olor nos atrae mucho

Una primera explicación hay que buscarla en el “efecto Madeleine”. Marcel Proust lo describió en su obra maestra. En busca del tiempo perdido Donde el gran escritor habla del emotivo, nostálgico y delicioso placer reconfortante de un pequeño trozo de magdalena empapado en té, capaz de… Lanzando una especie de viaje en el tiempo a través del mundo de los recuerdos.

El olor a gasolina puede hacernos sumergirnos en el pasado – biopianeta.it

Al igual que Madeleine Proust, Hasta el olor a gasolina parece capaz de revivir viejos recuerdos del pasado Nos transporta al pasado, hasta el punto de traernos recuerdos felices de viajes en coche con nuestra familia durante la infancia u otros bellos momentos pasados ​​con nuestros seres queridos o amigos. Esto puede ser lo que hace que la gasolina huela bien La capacidad de establecer una conexión emocional con experiencias felices del pasado.

Hay que buscar una explicación biológica. Vía medial-periféricaEl sistema de recompensa de nuestro cerebro es capaz de esto. Liberación de dopamina, la llamada «hormona de la felicidad» O mejor dicho, el neurotransmisor asociado al placer y la satisfacción. Percibir el olor a gasolina activaría el sistema de nuestro cerebro, proporcionándonos una sensación de bienestar y euforia. En esencia, sería un golpe de dopamina, un golpe Descargando energía positiva que puede hacernos sentir bien.

Por otro lado, como comentábamos al principio, el olor a gasolina tiene un lado desagradable. En otras palabras, como suele suceder c'Es la otra cara de la moneda: La gasolina sigue siendo tóxica y perjudicial para nuestra salud. Los vapores de gasolina se pueden inhalar durante mucho tiempo. Daños graves a los pulmones, al sistema nervioso e incluso al cerebro.. Con el debido respeto a los bonitos recuerdos de la infancia, lo mejor es evitar la exposición al olor a gasolina durante mucho tiempo.


Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll to Top