por Palo Menci –
Cuatro años y dos cambios de moneda, Venezuela parece haber salido de la llamada inflación soberana de 2017. A raíz de este fuerte impulso inflacionario, la política de hacer frente a la caída de los precios del petróleo ciertamente se ha llevado a cabo. 2013, reducción general del gasto público, restricciones a los préstamos bancarios, eliminación de los subsidios a los precios de la gasolina, menor énfasis en los controles de precios y liberalización del mercado de divisas a lo largo de los años bajo un estricto control gubernamental.
El valor cada vez más bajo y volátil de la moneda nacional llevó a una dolarización progresiva (dos tercios de todas las transacciones en 2021 se estimaron en dólares), lo que fue aceptado tranquilamente por el gobierno, que no hizo más que ampliar la brecha. Está entre los que cobran en moneda estadounidense y los que cobran en el gobierno y aún en bolívares, cobrando así con un poder adquisitivo irrisorio y no pudiendo vivir sin la ayuda de muchos familiares que han emigrado al extranjero.
Según el Banco Central de Venezuela, la variación de precios en diciembre fue de «solo» 7,6%, y Venezuela siempre ha gastado menos del 50% de la variación mensual de precios de los últimos 12 meses, lo que los analistas consideran el límite de alta inflación; Incluso en los últimos cuatro meses de 2021, la inflación se mantuvo en un solo dígito entre el siete y el ocho por ciento.
En los últimos cuatro años, la inflación mensual superó ampliamente el 100 %, y la peor finalizó en 2018, con una tasa anual que alcanzó el 130 060 %, y la contracción económica entre 2013 y 2018 fue del 47,6 %. Y sobre todo por la caída del precio del petróleo.
Recién en el primer trimestre de 2019 la inflación comenzó a descender, superando el 50% en pocas ocasiones.
Como Venezuela sigue teniendo la tasa de inflación más alta del mundo (686,40% en 2021), la certeza de que el proceso de mejora debe continuar y mantenerse fuerte ni siquiera es aceptable en los últimos tiempos, incluso en comparación con los países de la región latinoamericana. por ejemplo, Colombia tiene una tasa de inflación mensual de 0.73% y una anual de 5,62. %.
Mientras tanto, en los últimos días, Maduro ha sufrido una importante derrota electoral, incluso a nivel simbólico, pues la elección del gobernador del oriental estado de Parinas, donde nació Hugo Chávez, ha estado en entredicho.
El candidato opositor Sergio Garrido recibió el 55% de los votos en contra del ex canciller y yerno de Chávez, George Areza.
Son las alarmas para que el gobierno enfrente el descontento diario de la gente por la falta de servicios y la escasez de alimentos en todos los sectores.