Nuevas búsquedas en los alrededores del embalse del río Arad, en el Algarve, han concluido hoy, jueves 25 de mayo, en busca de indicios de la desaparición de madeline mccann, la niña inglesa de tres años que desapareció el 3 de mayo de 2007 en Praia da Luz, donde pasaba sus vacaciones con su familia. La policía portuguesa ha explicado, a través de un comunicado, que se han completado los trámites solicitados por sus compañeros alemanes y que el material recogido tras tres días de investigación será analizado en Alemania. Los investigadores, que se inclinan por la hipótesis de que la pequeña fue asesinada, nunca anunciaron que buscaban su cuerpo en el río Arad, a 50 kilómetros del lugar donde desapareció la pequeña, y eso no se puede descartar a más. Las búsquedas arrojan pistas sobre cualquier otro delito cometido por Christian Bruckner, de 47 años, oficialmente sospechoso de secuestrar y matar a Maddie y en prisión en Alemania desde 2019 por varios delitos de violencia sexual cometidos entre 2000 y 2017 también en Portugal, donde vivió entre 1995 y 2007. Según el estudio de los registros telefónicos, en efecto, el 3 de mayo de 2007, el sospechoso se encontraba cerca del Ocean Club de Praia da Luz, una instalación turística donde la familia McCann pasaba sus vacaciones y del departamento de cuya niña sus padres desaparecieron mientras cenando a una distancia de pocos metros. Entre el martes y el jueves, los investigadores peinaron el embalse de la zona, un pequeño trozo de tierra rodeado de árboles que el propio Bruckner describió en algunas declaraciones como un «pequeño paraíso» donde solía recluirse. El lugar ya fue escenario de allanamientos en 2008 por iniciativa de un abogado de Madeira, Marcos Aragão Correa, quien recibió un reporte de que la pequeña iba a ser arrojada al agua por esos parajes.
Foto de portada: Ansa/Queen Swick | Los padres de Madeleine McCann
Leer sobre Abierto