El corazón es nuestro órgano principal, el verdadero motor que hace funcionar y gobierna todo lo demás.
Es importante saber escucharlo y poder sentir las señales que nos envía porque, en algunos casos, esto podría ser un indicio de que algo anda mal. Sin embargo, en otros casos, esto puede indicar una pequeña anomalía que debe ser controlada, pero nada de qué preocuparse.
Cuántas veces hemos escuchado la frase “corazón en la garganta” o “corazón hundido”. Esta sensación es la que describen muchas personas que han experimentado algún tipo de latido cardíaco.
Es como si faltara un latido, o un latido más intenso, que sientes cuando el pecho se eleva. Esta condición afecta una forma muy común de arritmia llamada contracción.
También común en personas perfectamente sanas.
Este cambio en el ritmo cardíaco es muy frecuente, tanto en pacientes con enfermedades cardíacas como en personas completamente sanas. A menudo, de hecho, las personas ni siquiera saben que la padecen.
Esto sucede porque, en muchos casos, esta condición es asintomática.
Un corazón tembloroso, ansioso y tenso puede anunciar la presencia no deseada de esta anomalía bastante generalizada.
Como argumenta Humanitas, los impulsos de la contracción adicional pueden ocurrir con frecuencia o ser improvisados. Sin embargo, la mayoría de las veces, esta será una condición benigna, por lo que no es preocupante ni patológica.
El estrés y la ansiedad pueden jugar un papel
La contractura excesiva puede surgir por muy diferentes motivos. A veces esto puede deberse a un exceso o deficiencia de calcio, magnesio o potasio en la sangre. Recordamos, de hecho, que las sales minerales serán muy importantes para nuestra salud.
solo lo creo deficiencia de este mineral Puede aumentar su riesgo de desarrollar problemas cerebrales, tiroideos y otros.
Sin embargo, la contracción excesiva también puede estar asociada con problemas psicofísicos. Por ejemplo, el estrés, la tendencia a la preocupación, el abuso de la cafeína o el tabaquismo también pueden desencadenar este trastorno. Un corazón tembloroso, la ansiedad y la tensión pueden, de hecho, anunciar que el cambio del corazón está bajo control.
Estas son las pruebas que debes hacerte para comprobar tu salud
Después de la sensación inicial de «latidos del corazón» seguida de una consulta médica, es posible que debamos someternos a un ECG.
Para obtener resultados más precisos, el especialista puede sugerir un electrocardiograma dinámico según Holter. En este caso, el análisis será más preciso, porque el corazón será monitoreado durante 24 horas.
En general, siempre es recomendable contactar con un experto en cuanto sintamos una situación similar a la descrita anteriormente. Solo así seremos encaminados a los mejores pasos a seguir para nuestro bienestar.