Tres médicos, de distintos hospitales rumanos, corren peligro de acabar procesados por cargos Homicidio involuntario. La fiscal Eleonora Fini, que investiga la muerte sospechosa de Valeria Fioravanti, de 27 años, ocurrida el pasado mes de enero, después de que un peritaje parece no tener dudas: los sanitarios no habían comprendido que la joven padecía Meningitis No la trataron y la dejaron morir. En urgencias, primero pensaron que era un simple dolor nervioso y luego un dolor lumbar. En ambos casos, los médicos recetaron sólo Toradol, un analgésico que en realidad aliviaba el dolor al hacer progresar la enfermedad que mató a la mujer.
la historia
Todo empezó en Navidad del año pasado, cuando… Valeria Fioravanti Fue al Policlínico Campus Biomédico de Roma para someterse a una resección de orzuelo axilar. Tres días después, empezó a sentirse mal, con fuertes dolores de cabeza y mareos. En ese momento, acudió a los médicos de la clínica Caselino, quienes le inyectaron 30 miligramos de Toradol. A la mujer le dijeron que estaba soltera. dolor de cabeza Por movimiento incorrecto del cuello mientras se secaba el cabello. Los siguientes días de tratamiento con analgésicos trajeron beneficios, pero apenas terminó de tomar la medicación, Valeria volvió a enfrentar problemas.
Viajes a la sala de emergencias
Después de pasar la Nochevieja en casa con un terrible dolor de cabeza, el joven de 27 años decidió acudir nuevamente al hospital. sala de emergenciasEsta vez en el Hospital San Giovanni Addolorata. Sin embargo, los médicos confirmaron el diagnóstico de dolor de cabeza y agregaron que sospechaba de dolor lumbar. Se recomendó a la niña que siguiera tomando analgésicos sin realizar más pruebas instrumentales. La situación empeoró dos días después, cuando la mujer fue hospitalizada nuevamente en estado crítico en San Giovanni Addolorata. Sólo entonces una tomografía computarizada arrojó el terrible resultado: meningitis aguda. El tratamiento hospitalario fue inútil. cuidados intensivos. Tras caer en coma, Valeria Fioravanti falleció el 10 de enero.
Investigación
ahora soy los doctores Quienes no reconocen la enfermedad pueden ser acusados. En cuanto al Fiscal General Finney, el periódico informó RepúblicaLos sanitarios fueron superficiales en el trato a la paciente, aunque la joven hizo todo lo que estuvo a su alcance para encontrar una solución a su enfermedad, por lo que acudió a tres hospitales diferentes. Los tres trabajadores sanitarios que atendieron a la joven de 27 años no entendieron que Valeria padecía meningitis. el analgésicos Alivió los síntomas, pero no curó la enfermedad que le provocó la muerte.