Las anomalías meteorológicas recientes, que provocan un clima cada vez más variable, han revolucionado el panorama climático europeo. La entidad conocida de alta presión esAnticlon azure., avanzó hacia la Rusia europea, cruzando las Islas Británicas y allanando el camino para los sistemas de depresión en el Mediterráneo.
Diferencias meteorológicas en el Mediterráneo
Impactos en el norte de África e Italia
El reordenamiento climático tuvo efectos importantes en las regiones de Italia y el norte de África. Tras una inusual ola de calor en abril y principios de mayo, que provocó temperaturas superiores a los 40 grados centígrados en Marruecos, se ha producido un fuerte descenso de las temperaturas. En muchos lugares, las máximas ni siquiera alcanzaron los 20°C.
Estudio de caso: Midelt, Marruecos
Un buen ejemplo de ello es la región de Midelt, situada en el corazón de Marruecos, a una altitud de 1.500 metros sobre el nivel del mar. Aquí, el 17 de mayo, la temperatura mínima descendió a apenas 7,8°C, acompañada de lluvia con una acumulación de unos 6 mm. Las temperaturas máximas a lo largo de las costas mediterráneas de Marruecos y Argelia nunca superaron los 21-22 grados centígrados, incluso aquí bajo la lluvia.
clima en europa central
Fuertes lluvias y bajas temperaturas
En Europa Central se registraron precipitaciones intensas: 62 mm en Lilienfeld y 64 mm en Tulln, ambas en Austria. Las temperaturas máximas fueron notablemente bajas, con Innsbruck alcanzando solo 10,4 °C, 10 grados por debajo del promedio estacional. En Viena, la precipitación alcanzó los 28 mm, lo que elevó el total mensual a 74 mm, superando el promedio de 30 años. Aquí, la temperatura máxima de 9,6°C estuvo 11,2° por debajo de lo normal, lo que hace que hoy sea uno de los días más fríos registrados.
Contrastes climáticos en Europa del Este
Ola de calor en Rusia y Oriente Medio
Por el contrario, la Rusia europea está experimentando una ola de calor inusual, con altas temperaturas que alcanzan los 26-28 grados centígrados al este de Escandinavia. En particular, la localidad rusa de Karpogorye registró una temperatura máxima de 26 grados centígrados, que es la segunda temperatura diaria más alta desde el 17 de mayo de 1984. El calor extremo también se presenta en Turquía e Israel, donde hay aire muy caliente del sur, especialmente de Egipto, provocando altas temperaturas. En Turquía, las altas temperaturas en la región de Iskenderum alcanzaron los 37,2 °C, mientras que en Israel, las temperaturas alcanzaron los 41,6 °C en Sedum.
Estas perturbaciones climáticas nos recuerdan lo importante que es monitorear y comprender la dinámica del clima. Los ciclones de las Azores, el Mediterráneo, Marruecos, Italia, Austria, Rusia y el Medio Oriente proporcionan evidencia de nuestros tiempos climáticos en constante cambio.