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El Consejo Electoral de Venezuela anunció el martes que las elecciones presidenciales se celebrarán el 28 de julio: una fecha no aleatoria, sino el cumpleaños de Hugo Chávez, el fundador del Partido Socialista que gobierna el país desde hace 25 años. Nicolás Maduro, el actual presidente, buscará la reelección: ha estado en el cargo durante 11 años, es profundamente impopular y su reelección de 2018 fue muy disputada y manipulada. Parece que tampoco en esta ocasión quiere permitir una verdadera competencia democrática.
No está claro quién podrá oponerse al presidente saliente: María Corina Machado es la líder de la oposición y está haciendo una larga campaña en todo el país, pero no podrá presentarse. Una sentencia muy controvertida le prohibió ocupar cualquier cargo público durante 15 años: según la oposición y muchos observadores internacionales, el resultado de un procesamiento por motivos políticos. El 25 de marzo, cuando se cierren las listas electorales, los partidos de oposición tendrán que decidir si la reemplazan con otro candidato, pero no parecen dispuestos a hacerlo.
En octubre de 2023, la oposición organizó primarias para elegir un candidato unificado que se opusiera a Maduro: Machado ganó con una mayoría muy amplia y más de dos millones de votantes, una cifra que sorprendió al propio gobierno de Maduro. Pero en enero, la Corte Suprema de Justicia de Venezuela, controlada por Maduro, confirmó su prohibición de participar en las elecciones, basándose en una serie de acusaciones, especialmente de corrupción. se mueve Por la Contraloría General, organismo que supervisa una serie de cuestiones económicas en los organismos públicos.
Machado es una ingeniera de 56 años que pertenece al partido “Vente Venezuela”, que fundó en 2012. La apodan “Vente Venezuela”. dama arce (Dama de Acero) y en 2018 fue Insertar de bbc En la lista de las 100 mujeres más influyentes del mundo. Se define a sí misma como una liberal centrista y fuertemente anticomunista. Tiene en gran estima la firmeza y firmeza con la que ha tratado al régimen de Maduro, criticándolo y permaneciendo en el país cuando otros opositores se han ido (Maduro ha limitado severamente la libertad de expresión y los derechos civiles en el país, y muchos disidentes están detenido). prisión). Pero en los últimos años también ha suavizado algunas de sus posiciones y ha ampliado su alcance de consenso.
El gobierno de Maduro no parece dispuesto a revocar la sentencia de Machado, que los observadores internacionales consideran engañosa. Hasta el momento, las múltiples presiones internacionales para celebrar elecciones democráticas no han surtido efecto. Las más urgentes fueron las adoptadas por Estados Unidos, que podría volver a hacer efectivas el 18 de abril las sanciones económicas impuestas a Venezuela, que levantó en octubre pasado.
La imposición de sanciones se produjo tras la crisis institucional que siguió a las elecciones de 2018, que los observadores internacionales consideraron inválidas debido a fraudes e irregularidades generalizados. En enero de 2019, Juan Guaidó, líder de la oposición y presidente del Parlamento, se declaró «presidente interino» de Venezuela: casi 60 países, incluidos Estados Unidos y las democracias de la Unión Europea, lo reconocieron como presidente legítimo. Sin embargo, Maduro mantuvo el control sobre el país y Guaidó fue expulsado del país y luego condenado por malversación de fondos públicos: ahora vive en Estados Unidos. En octubre de 2023, un acuerdo entre la oposición y el gobierno para celebrar elecciones democráticas convenció a Estados Unidos de levantar las sanciones económicas al gas, el petróleo y el oro.
Sin embargo, la prometida apertura democrática no se concretó, y luego de que Machado fuera excluido de las próximas elecciones, Estados Unidos volvió a amenazar con reimponer sanciones, cuya reimplementación está prevista a partir del 18 de abril. Al mismo tiempo, Maduro, que denunció la existencia de un plan para asesinarlo y dar un golpe de Estado, intensificó su represión y encarcelamiento de opositores, activistas y miembros de organizaciones defensoras de los derechos humanos. Los líderes de algunos partidos de oposición. Fue retirado por el tribunal.Fueron reemplazados por elementos más cercanos al gobierno, que representan sólo una oposición superficial (en Venezuela se les llama alacranesEs decir, escorpiones).
El gobierno venezolano bloqueó el martes las transmisiones de la televisión por cable alemana Deutsche WelleQuien realizó una investigación sobre casos de corrupción en el país. El gobierno de Venezuela también fue acusado Los New York Timesagencia de noticias Agencia de noticias Y el periódico español. El País por parcialidad y amenazó con impedir que sus corresponsales cubrieran las elecciones.
Junto a la restricción de las libertades personales, Venezuela vive desde 2014 una crisis económica sin precedentes: entre 2013 y 2021, el PIB del país cayó un 75 por ciento, el peor resultado de los últimos 50 años para un país que no está en guerra. Han abandonado el país desde 2014. Casi ocho millones de personas, quienes en su mayoría emigraron a Estados Unidos: representan más del 25 por ciento de la población total. En 2019, el 90 por ciento de las familias viven por debajo del umbral de pobreza.
Debido también a esta situación económica, así como a la represión política, la popularidad de Maduro es muy baja en el país: encuestas independientes estiman que en unas elecciones democráticas no contaría con el apoyo de más del 20 por ciento de los votantes.
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