Divididos y débiles, pero no derrotados. Así luce Hamás seis meses después del ataque a Israel del 7 de octubre, según un análisis de expertos y fuentes cercanas al movimiento, que confirman que todavía controla efectivamente amplias zonas de la Franja de Gaza, incluidas aquellas donde se encuentra la mayoría de vive la población. De la población. El periódico The Guardian informa que en los últimos días se vio a “elementos” de Hamás armados con palos controlando el régimen en Khan Yunis, la ciudad situada en el sur de la Franja de Gaza, de la que los israelíes se retiraron en los últimos días. El miércoles reanudaron el lanzamiento de cohetes contra el sur de Israel.
Si los dirigentes de la organización no son decapitados (Yahya Sinwar sigue siendo inexpugnable) y muchos de los túneles permanecen intactos, lo que se ha reducido es la capacidad de Hamas para gobernar la Franja, mientras miles de combatientes y depósitos de armas yacen prácticamente vacíos. Todavía existen tensiones entre Sinwar y los líderes del movimiento en el extranjero con respecto a los términos del alto el fuego y la estrategia futura de Hamás, según fuentes informadas en contacto directo con algunas de las figuras principales del movimiento. A esto se suma la creciente oposición entre la exhausta población de Gaza, que está pagando el precio del ataque del 7 de octubre. Tanto es así que en los últimos días Hamás se vio obligado a publicar un largo comunicado en su canal Telegram, en el que enumeraba todo lo que había hecho por el pueblo de Gaza, para garantizar que la guerra contra Israel terminara con victoria y libertad para el Palestinos.
Mientras tanto, los israelíes insisten en decir que mataron entre 30.000 y 40.000 milicianos, cifra que Hamás niega. Por otra parte, es imposible obtener una confirmación independiente, pero según algunos analistas, centrarse en el «número de muertos» revela que no existe la capacidad de los estrategas israelíes para comprender la naturaleza de su enemigo. Según Mukhaymar Abu Saada, profesor de ciencias políticas en la Universidad Al-Azhar de Gaza, que ahora se encuentra en El Cairo, entre una quinta y una cuarta parte de la población de la Franja de Gaza puede ser descrita como leal a Hamás, cuyo apoyo no disminuirá. “Como mínimo, quedará debilitado militarmente, pero esto no pondrá fin a Hamás. Hamás continuará en el nivel de base debido a lo que han pasado más de dos millones de personas. Aunque hay muchísimos palestinos que están insatisfechos con Hamás, hay otros que seguirán brindando apoyo en diferentes lugares y en diferentes momentos”. Luego comenta: «No creo que haya una crisis de liderazgo, pero Hamás ya no podrá llevar a cabo la resistencia armada de la misma manera».