La subsecretaria de Estado para Asuntos de la Juventud, Sarah El-Hairy, señaló la campaña en nombre del ejecutivo de París, quien describió la imagen de la mujer dividida en dos como «extremadamente impactante». «Es lo contrario de los valores que defiende Francia», dijo MoDem, portavoz del movimiento centrista, y exigió explícitamente «una retirada completa y no publicar esta campaña ni en el sitio ni en las redes sociales».
La extrema derecha francesa reaccionó contra la Iniciativa de Estrasburgo. «Cuando las mujeres se quitan el niqab, son libres, no al revés», escribió en Twitter la líder del Rally Nacional Marine Le Pen.
La polémica también llegó a la sala de prensa de la Comisión Europea, dado que Bruselas cofinanció la campaña. Pero un portavoz de la UE dejó en claro que el ejecutivo de la UE no había «validado» su contenido, ya que el Consejo de Europa tiene un papel independiente.
Un hervidero de polémica, pero el Consejo de Europa acabó con ella. «Los tuits han sido cancelados – explicamos desde Estrasburgo – y consideraremos hacer un mejor proyecto para el proyecto».